Hay algo ahí
en la cercanía de sus pasos
en toda la luz que se filtra entre nosotros
como la aproximación del suspiro
un páramo de azucenas violetas
en las rodillas
apenas un ligero temblor en el idioma del cielo
cuando habla lluvia, cuando dice llave
repartir el significado es incluso más fácil
que el rasguño en lo hueco de la flor
al introducir los dedos en el olor del tallo
el débil vuelo aprendido a pared y pájaro
ahora
toda la superficie del cuerpo es abrazo
la paciencia en los ojos siempre atentos
antes de desplegar los cabellos
y elevar el pecho a la altura del amor
como zurcir con estas manos mías
este nombre tuyo que aún respiro meciendo miedos